domingo, 22 de febrero de 2009

Estos días azules y este sol de la infancia

El 22 de febrero de 1939 falleció en Colliure, Francia, el excelso poeta Antonio Cipriano José María y Francisco de Santa Ana Machado Ruiz, Antonio Machado para todos nosotros. Grande entre los magníficos de la generación del 98, murió exiliado tras la caída de la Barcelona republicana en la Guerra Cilvil Española. En los bolsillos del poeta hallan un último verso: "Estos días azules y este sol de la infancia".
Hace hoy 70 años de aquello, y su legado poético sigue llegando a los corazones de sus lectores como llegará así pasen los años y los siglos.
Valga al lector una muestra de su poesía en la voz del coro de la Universidad Autónoma de Madrid, como prueba de lo presente que sigue estando la obra del autor. Serrat fue responsable de la musicalización de una parte de ella con gran éxito. ¿A quién no le llega al alma Cantares? Murió el poeta lejos del hogar, le cubre el polvo de un país vecino. Sit tibi terra levis.

2 comentarios:

Madam Beus dijo...

Precioso :)

Creíque y Penséque dijo...

Machado no se merece menos. Es más, se merecería muchísimo más. Me alegra que te haya gustado.